A nivel personal
Biodanza es recomendable tanto a personas que desean mejorar su calidad de vida y relaciones, como a personas con dificultades físicas, emocionales, cognitivas, sensoriales, y como complemento integrando otros procesos terapéuticos.
En el campo laboral
A personas que se dedican en el sector de la salud que desean incluir un sistema vivencial dentro del encuadre clínico y/o psicoterapéutico.
A educadores aportando elementos para el desarrollo de la inteligencia emocional afectiva y el aprendizaje vivencial.
A trabajadores de otras disciplinas con interés de integrar instrumentos que amplíen y enriquezcan el campo de sus quehaceres profesionales
Biodanza habilita para estimular y desarrollar las capacidades potenciales saludables que todos poseemos más allá de la enfermedad.
Facilitar Biodanza en:
• Grupos de vivencia semanal
• Talleres
• Biodanza en Instituciones (educativas, salud, comunitarias, empresas, y otras)