Primer Módulo de la Formación en Biodanza.
“Diálogo: La Danza de la Palabra”. Didacta Claudia Perlo.
“REFLEXIONANDO SOBRE LA METODOLOGIA VIVENCIADA EN EL SEMINARIO ”. Lucia Ballatore
El Seminario fue un auténtico banquete, un acontecimiento propio de una propuesta de Educación Biocéntrica. Poco a poco, con amorosidad y conocimiento, se fue fraguando un modo de trabajo y fundamentalmente, una manera de ser y de estar con los Otros/as dentro de un ambiente enriquecido que fue despertando en cada uno el despliegue y reconocimiento de sí mismo y de los otros/as en la danza de las palabras, los silencios, los gestos, las miradas.
Con maestría, ternura, cuidado y progresividad la facilitadora fue abriendo ese espacio de posibilidades necesario para facilitar la vivencia del complejo método integrativo biocéntrico: integrando lo dialógico, lo vivencial, lo reflexivo para habilitarnos a la acción transformadora.
El clima del encuentro, la generación de la matriz grupal y la conexión con el tema generador se comenzó a gestar en los días previos al espacio presencial.
A través de la comunicación sostenida dentro de un grupo de whatsapp, apelando al uso de diferentes lenguajes creativos (palabras, música, gestos, imágenes) la facilitadora, se presentó dando la bienvenida para prepararnos juntos para el encuentro y desde este invitación fue habilitándonos para que cada uno, a su ritmo, fuera conectándose con las palabras, emociones, sensaciones que nos despertaba este seminario y poco a poco, cada uno nos fuimos dando permisos para desplegar nuestros potenciales creativos y expresar nuestra propia voz y de este modo, fuimos creando y nutriendo lazos invisibles entre todos los participantes.
Durante todo el desarrollo del encuentro se ofrecieron auténticas, coherentes, amorosas e integradas VIVENCIAS ONTOLÓGICAS Y VIVENCIAS EPISTEMOLÓGICAS, que despertaron la presencia viva, activa, alegre, afectiva e interesada de todos los participantes y el surgimiento de una auténtica VIVENCIA PEDAGOGICA.
Hay varias prácticas que podemos sostener para provocar una vivencia pedagógica: Ejercicios de biodanza, círculo de cultura, caminatas, rituales de vínculos, dramatizaciones, juegos, etc.
Me voy a detener a analizar una de las prácticas que fue recurrente en este seminario: el JUEGO. El juego es mucho más que jugar, es mucho más que un juguete, el juego es vida. Es una potente herramienta para la transformación de las personas, grupos y organizaciones. Nos ayuda a reelaborar situaciones difíciles porque es en el propio juego donde se encuentran alternativas como posibilidades inimaginables.
Mi profundo agradecimiento a cada uno de los integrantes de esta matriz,
en especial a Claudia por todo lo vivido, aprendido, desaprendido y gozado.
